Lee con tus hijos.

Por: Ruth Claudio

La lectura sin duda es de suma importancia para nuestros hijos. No solamente porque la utilizan en la escuela, sino porque los prepara para el futuro y les expande las oportunidades de aprendizaje a un nivel sobrenatural. Muchas veces nuestros hijos presentan dificultades en la escuela relacionadas a la lectura y como padres nos desesperamos y no encontramos la mejor manera de ayudarles. La buena noticia es que esa solución se encuentra mucho más cerca de lo que imaginas. La solución es LEE CON TUS HIJOS.

Estamos viviendo una realidad social donde la lectura se ha convertido en algo anticuado, fuera de moda y de muy poco uso. La tecnología, aunque es excelente, ha provocado que nuestros hijos tengan acceso a tantas maravillas sin la necesidad de leer. Ya los niños a muy temprana edad comienzan a utilizar equipos y juegos electrónicos, los cuales dominan a perfección sin ni siquiera leer un simple manual de instrucciones. Cada vez a más corta edad se le comienzan a regalar este tipo de juguetes y al momento de recibir un libro de regalo les parece algo aburrido.

A continuación le daré cinco recomendaciones simples, pero que pueden ser de mucha ayuda tanto para usted como para sus hijos. Les reto a intentarlas, no tienen nada que perder...pero si mucho por ganar:

1. Comience dando el ejemplo.
Muchos padres le exigen a sus hijos lo que ellos no hacen. Si quiere que su hijo se convierta en un buen lector usted se tiene que convertir en uno primero. Busque un tema que sea de su interés y comience a leer. Pueden ser revistas, periódicos, libros, información en el internet, novelas, La Biblia o cualquier otro recurso. Comience sacando unas horas semanales para leer y asegurese que sus hijos lo observen mientras lee.

2. Llévelos con usted a la libreria o sección de libros de su tienda preferida.
De vez en cuando lleve a sus hijos a la sección de libros, permítale ojearlos y ofrézcale la oportunidad de escoger alguno que le llame la atención. Si ningún libro le llama la atención, ayudelo a buscar algo relacionado a sus intereses. Motívelo, la variedad de libros y de temas de interés es inmensa.

3. Invierta en libros.
No podemos negar que cada vez los regalos que le compramos a nuestros hijos son más sofisticados y de un alto costo. No tiene que ser así. Si le enseñamos a nuestros hijos el valor de los libros y les estimulamos a leer no pasará mucho tiempo y su hijo comenzará a apreciar y a pedirle que le compre más libros. No tenga miedo en invertir en ellos, si a veces no lo pensamos mucho para gastar una cantidad de dinero en un juego electrónico que en unas semanas ya no tendrá más uso, pues entonces, ¿porque no invertir nuestro dinero en un libro? Comience a crear una pequeña biblioteca que este al alcance y disponibilidad de todos los miembros de la familia.

4. Lean en familia.
Establezca el momento de leer en familia. Una vez a la semana, a la misma hora siempre se apagarán todos los aparatos electrónicos y se dedicará por lo menos media hora para leer. Si los niños son pequeños los padres pueden leerle y luego permitirles manipular los libros. Si los niños son más grandes cada cual puede leer lo que mejor prefiera. Ejemplo: Mamá, una revista de moda; Papá, una revista de automóviles; el niño, un cuento sobre animales salvajes y la niña, un cuento de Princesas.

5. Comience hoy.
No pierde nada con intentarlo. Quizás al principio no sea de mucho agrado para la familia, pero si pone en práctica las cinco recomendaciones a la vez le aseguro que se sorprenderá de los resultados. No espere más, adelante.